Ya volvemos a estar aquí con lo que va pasando en la investigación del World Largest Dungeon. Son cuatro sesiones ya, y el módulo A empieza a guardar pocos secretos para nuestros aventureros. Allá vamos con lo que dio de sí la última partida:
Sala A80. Guardias Orcos
En la sala donde se habían enfrentado a lo mejor de las fuerzas orcas de ésta parte de la mazmorra y tras descansar, les apareció de nuevo el ya conocido caballero de la muerte. En ésta ocasión el combate fue increíblemente corto, y es que el caballero apenas duró doce segundos contra los devastadores golpes del grupo.
Sala A86. Sala de Rechazo
Una habitación de un tamaño considerable, repleta de desperdicios y de la que sale un olor muy desagradable.
Al entrar en la sala, y tras controlar las nauseas provocadas por el olor, tuvieron que enfrentarse a una pequeña manada de ratas infernales, ratas que pasaron a la historia en pocos segundos.
Sala A80. Mantoscuros a Cascoporro
En ésta sala había la friolera de siete mantoscuros, lo malo es que estaban heridos, y duraron muy poquito. Por lo menos fueron capaces de herir levemente al grupo, que a éstas alturas se sentía poco menos que inmortal.
Sala A83. Trampa Bola de Fuego
Como bien dice el nombre de la habitación, aquí se encontraron con una trampa de bola de fuego. Lo malo es que se la comió uno de los esqueletos controlados por Ivor Darkair.
Sala A49. El recibidor Largo
Como su propio indica, ésta sala es increíblemente larga (algo mas de un kilómetro), haciendo que las paredes del fondo desaparezcan en la oscuridad. Todo el suelo está alfombrado por distintos cadáveres, desde estirges y mantoscuros hasta orcos y kobolds.
Una sala de paso plagada de puertas por la que pasaron varias veces en su deambular por la mazmorra.
Sala A91. El Mas Fuerte Sobrevive
En el suelo hay evidencias que han pasado varios grupos apartando los cascotes, por lo demás una sala grande sin nada en especial.
Aquí había dos mantoscuros experimentados al acecho, pudieron atacar sin ser vistos, y por poco no acaban con la vida de Ivor Darkair. La oscuridad que provocan empezaba a ser fastiadosa para el grupo.
Y ya por hoy, en breve seguimos con la odisea.
Sala A80. Guardias Orcos
En la sala donde se habían enfrentado a lo mejor de las fuerzas orcas de ésta parte de la mazmorra y tras descansar, les apareció de nuevo el ya conocido caballero de la muerte. En ésta ocasión el combate fue increíblemente corto, y es que el caballero apenas duró doce segundos contra los devastadores golpes del grupo.
Sala A86. Sala de Rechazo
Una habitación de un tamaño considerable, repleta de desperdicios y de la que sale un olor muy desagradable.
Al entrar en la sala, y tras controlar las nauseas provocadas por el olor, tuvieron que enfrentarse a una pequeña manada de ratas infernales, ratas que pasaron a la historia en pocos segundos.
Sala A80. Mantoscuros a Cascoporro
En ésta sala había la friolera de siete mantoscuros, lo malo es que estaban heridos, y duraron muy poquito. Por lo menos fueron capaces de herir levemente al grupo, que a éstas alturas se sentía poco menos que inmortal.
Sala A83. Trampa Bola de Fuego
Como bien dice el nombre de la habitación, aquí se encontraron con una trampa de bola de fuego. Lo malo es que se la comió uno de los esqueletos controlados por Ivor Darkair.
Sala A49. El recibidor Largo
Como su propio indica, ésta sala es increíblemente larga (algo mas de un kilómetro), haciendo que las paredes del fondo desaparezcan en la oscuridad. Todo el suelo está alfombrado por distintos cadáveres, desde estirges y mantoscuros hasta orcos y kobolds.
Una sala de paso plagada de puertas por la que pasaron varias veces en su deambular por la mazmorra.
Sala A91. El Mas Fuerte Sobrevive
En el suelo hay evidencias que han pasado varios grupos apartando los cascotes, por lo demás una sala grande sin nada en especial.
Aquí había dos mantoscuros experimentados al acecho, pudieron atacar sin ser vistos, y por poco no acaban con la vida de Ivor Darkair. La oscuridad que provocan empezaba a ser fastiadosa para el grupo.
Y ya por hoy, en breve seguimos con la odisea.
0 comentarios:
Publicar un comentario